Pan blanco hecho en casa (homemade white bread).

Buenos días!

Hoy voy a hacer una entrada inusual, por lo menos hasta el momento.

El otro día un amigo, Juan Carlos a quien ya os he presentado en alguna otra ocasión, me pidió que colgase alguna receta de cocina.

Como también me gusta mucho cocinar he decidido a enseñaros lo que cocino en casa día a día.

La verdad es que suelo mirar un montón de páginas web de cocina y estoy todo el día viendo Canal Cocina mientras coso o hago alguna otra cosa. Me alucinan las recetas que veo o leo pero todas ellas me parecen tan excepcionales que no me sirven para cocinar en el día a día... Me sirven para hacer algo especial cuando tenemos alguna celebración o queremos salirnos de la norma pero no para lo que comemos a diario. Además nosotros en casa tenemos sobrepeso y debemos comer con poca grasa, comida sin harinas, con salsas ligeras como por ejemplo sin nata... vamos que ya os imagináis!!! Ahora que estoy en paro tengo mucho más tiempo para cocinar y la verdad es que estoy disfrutando mucho de la cocina.

El cocinar con poca grasa requiere más esfuerzo, tiempo, paciencia y ponerle más imaginación para que lo que se cocine quede sabroso y rico, pero merece la pena!!!! Bueno y qué deciros de las sartenes... se necesitan el doble de sartenes porque cocinar la proteína a la plancha sin casi aceite destroza las sartenes!!! Pero qué se le va a hacer...

La nutricionista a la que íbamos hasta hace poco nos permite cocinar con vinagre, salsa de soja y vino blanco (siempre y cuando evaporemos bien todo el alcohol que contiene), así que últimamente estoy cocinando bastante con estos ingredientes. La semana que viene cambiamos de nutricionista con lo que imagino que tendré que amoldarme a las pautas que ella me de... ya os contaré.

Bueno, hoy os voy a enseñar cómo hago pan blanco casero.

Es muy fácil y el resultado es impresionante.

En casa desayunamos pan tostado con mermelada sin azúcares añadidos y lo que suelo hacer es hacer el pan el fin de semana. Si no nos lo comemos, lo troceo y lo guardo en la nevera en paquetitos individuales para ir comiéndolo entre semana. Ahora os lo enseño.

Antes de nada quiero advertiros que también soy autodidacta en esto de la cocina. Muchas recetas me las invento yo, otras  las sigo al pie de la letra, otras las modifico y otras las he heredado de mi amatxu que cocina como los ángeles... así estamos todos!!!!

Os voy a enseñar las cosas tal y como las hago yo, sin miramientos y sin molestarme en poneros las cosas bonitas o limpiar por ejemplo el horno, el cual está hecho unos zorros porque lo utilizo mogollón!!! Os mostraré todo tal y como se tiene y se utiliza en una cocina normal de casa que se utiliza todos los días y en mi caso muchas veces al día. Así que si aparece algo sucio o feo, desde aquí os pido mis más sinceras disculpas!!!!

Bueno, pues ahí vamos... espero explicarme bien y que os gusten mis entradas gastronómicas!!!


Para hacer pan blanco los ingrediente que necesitamos son:

• agua
• levadura fresca
• sal
• harina

Ésta es la levadura que yo utilizo. Es levadura fresca como podéis ver y el paquetito contiene 25 gramos de levadura. Yo la he podido comprar en BM y en el supermercado del Corte Inglés, pero estoy segura que habrá en casi todos los supermercados. Si no la encontráis siempre podéis encargar levadura fresca en cualquier panadería donde os la consiguen sin problema alguno.
En cada paquete que compro vienen dos como el de la imagen. Se puede mantener o en el frigorífico si se va a utilizar pronto (algo así como en 15 días...) o congelada si queremos tenerla para utilizar más adelante.

 
Normalmente suelo utilizar este bol lleno de agua como podéis ver en la imagen sin calcular la cantidad de agua que utilizo, pero esta vez la he medido y he utilizado 1 litro de agua justo. También es cierto que si os pasáis no pasa nada!!!! Tan sólo necesitaréis un poco más de harina y os saldrá el pan algo más grande, quizás hasta mejor!!!!

Ya tenemos la levadura, el agua y la sal.

En casa nos gusta el pan contundente con mucha levadura pero seguramente con la mitad de levadura también os quedaría genial el pan!!!

Echamos la levadura en el agua y la derretimos amasándola un poco con la mano.

El agua queda opaca tal y como veis en la foto.

Esta es la harina de trigo que he utilizado, son dos kilos pero uno de los paquetes está empezado de la semana pasada.

Voy añadiendo un poco de harina y mezclando.

Cuando ya tengo un poco de harina añadida, echo un puñado de sal

y un pelín más... esto es manía!!! También nos gusta el pan saladito, pero eso ya a gusto del consumidor.

 
Seguimos añadiendo harina y mezclando.

Cuando ya tenemos bastante harina añadida, echamos harina en la encimera y volcamos la masa que tenemos en el bol sobre esta harina para amasar a partir de ahora a mano.

Empezamos a amasar a mano.

Normalmente dicen que se debe amasar hasta que la masa no se pegue en las manos, pero a mí me gusta dejarla un pelín antes, dejo de amasar cuando la masa empieza a despegarse de las manos pero se sigue pegando. No sé si me explico, espero que con las imágenes lo entendáis mejor.

Cuando tenemos ya la masa amasada la dejamos redondita y la tapamos con un trapo.

Ésta es la harina que me ha sobrado con lo que no he utilizado los dos kilos de harina que tenía reservados.

Tapamos la masa con un trapo que no esté húmedo.

Dejamos fermentar la masa 1 hora.

Yo procuro que no haya corrientes de aire en la cocina pero no sé si esta técnica tiene fundamento alguno... o es más bien costumbre!!!

Encendemos el horno con aire, arriba y abajo, como podéis ver en la imagen.

A 200ºC.

Y si queremos que la corteza nos quede crujiente, ponemos agua en la bandeja de abajo en el horno para que haya humedad en el horno. Este truco es la caña, lo aprendí en Canal Cocina.... me encanta!!!

Ponemos en la rejilla del horno papel de horno para que no se nos pegue la masa y se nos escurra por las rejillas.

Así está la masa a los 58 minutos de fermentación.

Mirad la diferencia antes de fermentar y después de fermentar.

 

Cuando haya pasado la hora de fermentación, destapamos la masa y damos la forma que queramos.

También podríamos dejar una segunda fermentación antes de meter al horno pero eso ya depende de la prisa que tengamos y de la paciencia de si nos compensa o no una segunda fermentación.

La verdad es que con una segunda fermentación luego el pan queda más esponjoso pero como a nosotros el pan en casa nos gusta contundente como ya os he dicho antes y es para hacer tostadas para desayunar, en este caso no me compensa la segunda fermentación.

En este caso como es pan para desayunar y para hacer rebanadas le doy forma de barra ancha.

También se pueden hacer bollitos, barritas pequeñas o se puede añadir: bacon, chorizo, queso, frutas escarchadas, cebolla caramelizada, aceitunas negras, pasas y nueces, pipas... vamos lo que nos apetezca. Yo en este caso lo hice tal cual, blanco sin más pero otro día os haré bollitos de chorizo o de aceitunas negras que quedan que te chupas los dedos.

Me gusta dejarlo uniforme por la parte de arriba, incluso hasta le hago unos pellizcos para que quede muy irregular y la corteza luego esté crujiente y abierta.

Ponemos la masa en la bandeja del horno y ... al horno.

Mientras tenemos el pan en el horno aprovechamos para limpiar la encimera que suele quedar con pegotes de masa. Para despegarlos bien suelo utilizar la cuchilla de la vitrocerámica sin sacar la cuchilla.

 
Así está el pan a los 45 minutos de cocción. A Iñaki le gusta el pan muy crujiente con lo que lo suelo tener 1 hora pero si os gusta más blanco con 45 minutos es suficiente para que esté bien hecho y de rechupete!!!

 
Y así queda el pan tras 1 hora de horno.

Impresionante y riquísimo!!!!

La parte de abajo del pan suele quedar algo blando y como a Iña le gusta también crujiente le doy la vuelta y lo meto un poquito más al horno, como unos cinco o diez minutos.

Así nos queda el pan después de 5 minutos boca abajo en el horno. No es mucha la diferencia pero lo justo para que la corteza de abajo no queda blandurri.

Sacamos el pan del horno y le damos la vuelta para dejar el pan enfriando por lo menos media hora. Si cortamos antes de esa media hora la miga no está asentada y se pegorrotea por dentro perdiendo su esponjosidad.

Así está el pan por un lado

 
Y así por el otro

Una vez que ya lo tenemos frío, hacemos rebanadas. Yo utilizo la el este aparato para cortar fiambre porque es mucho más cómodo y rápido pero antes de comprarlo cortaba el pan con cuchillo como todo quisqui.

Le doy un corte por la mitad

Y hago rodajas finitas para hacer paquetitos de tres rebanadas cada uno con papel film,

Una vez que tengo los paquetitos hechos los meto en la nevera y voy cogiendo un paquetito para desayunar todos los días.

Hoy he desyunado el pan que hice ayer y estaba de muerte!!!! De verdad que merece la pena!!!!

Animaos!!!!

Bueno, Juan Carlos, espero que te haya gustado la entrada.

Otro día te enseño a hacer una crema de espárragos para chuparse los dedos, muy sana y que se puede comer perfectamente cuando se está a dieta. A mí me encanta, sobre todo para las noches de invierno cuando llego destemplada a casa. Espero que te haya gustado el pan y que lo hagas en casa para que Asun desayune como es debido!!!!

Muchos besos y gero arte!